PREGUNTAS DEL TEMA 3
1.- ¿Qué distingue el conocimiento práctico en sentido fuerte y en el sentido débil?
1.- ¿Qué distingue el conocimiento práctico en sentido fuerte y en el sentido débil?
La distinción entre estos dos
tipos de conocimiento recae en la comprensión de los contenidos explicados o de
los procedimientos utilizados. El sentido débil se aplica a aquellas personas
que, tras realizar una acción, no son capaces de explicar cómo lo hicieron y ni
siquiera sabrían repetirlo. Sin embargo, el sentido fuerte se emplea cuando el
sujeto ha realizado una tarea con cierto grado de éxito y posteriormente, no
sólo es capaz de volverlo a hacer, sino que puede identificar y describir con
detalle cómo lo hizo.
Para que sea más fácil esta
comprensión, me gustaría poner un ejemplo en el contexto de la gimnasia
rítmica. Como entrenadora que soy, me he encontrado con gimnastas que, después
de realizar un mismo elemento (un equilibrio, por ejemplo) repetidas veces sin
ningún éxito, siguen sin saber qué están haciendo mal o qué deben hacer para
conseguir ejecutar dicho elemento correctamente. Por el contrario, hay otro
tipo de gimnastas que interiorizan más rápido y son capaces de realizar los elementos
correctamente y explicar qué hacen corporal y mentalmente: concentrarse, mirar
a un punto fijo, encontrar el eje, crear la sensación de “tirar hacia arriba”
para aguantar la posición, etc.
Sí que es cierto que muchas veces
nos hemos encontrado ante actividades, muchas de ellas obligatorias, que
carecían de explicación racional para llevarlas a cabo. Estamos de acuerdo en
que cada profesor tiene sus propios métodos de enseñanza, más o menos
educativos, pero todos ellos deben tener un componente explicativo. Las
explicaciones de muchos docentes se basan en: “Haz esto y hazlo así”. Afortunadamente y cada vez son más los
profesores que dedican una parte de la explicación a revelar el motivo de la
actividad. Porque recuerdo cuando entrenaba, y dedicábamos los primeros 45
minutos de la sesión a la preparación física, algo que yo relacionaba con
sufrimiento y agotamiento. Es decir, algo que no me gustaba porque tampoco
entendía para lo hacíamos. Con 10 años pensaba: “Si en la gimnasia no se corre,
ni se hacen abdominales…” Con el paso del tiempo, comprendí que la preparación
física me servía para aguantar un ejercicio completo. Desde entonces me lo tomé
más en serio. Y pienso que si mis entrenadoras hubiesen explicado para qué
teníamos que pasar un mal rato, seguro que muchas de mis compañeras, incluida
yo, habríamos sacado mucho más partido de esa “tortura”.
Por todo lo explicado
anteriormente, es más educativo enseñar
en el sentido fuerte. De esta forma los alumnos crearan conciencia de lo
que están haciendo y cómo lo están haciendo para poder repetirlo en el futuro,
o bien para mejorar la técnica y conseguir el objetivo.
2.- ¿En qué se diferencia el
razonamiento moral del adoctrinamiento moral? ¿Se puede razonar moralmente en
movimiento?
El razonamiento moral se define
como “el juicio de valor que hacemos ante determinadas situaciones en la que se
debe tomar una opción”. Es decir, es una reflexión ética basada en lo que es
correcto según su juicio y sus valores. Por otro lado, el adoctrinamiento moral
trata de inculcar una ética concreta que, en muchos casos, puede ser contraria
a las convicciones morales de los padres, que son los primeros responsables en
la educación de sus hijos y, por lo tanto, de su formación moral.
Hace unos años en España, con la
incorporación de la asignatura Educación para la Ciudadanía, hubo mucha
controversia ya que “algunos contenidos de la Educación para la ciudadanía chocan
con la moral objetiva, y más concretamente con aquellas exigencias de la ley
natural que son de obligado cumplimiento para cualquier sociedad rectamente ordenada”
(J.A. Rodríguez).
Según Arnold, los valores que la
actividad física y el deporte implican contribuyen a desarrollar el
razonamiento moral. La relación entre los compañeros, el compromiso, la
búsqueda de un bien común, la realización de uno mismo, etc. Son aspectos que,
mediante el deporte, deben ser entendidos como mecanismos de razonamiento
moral.
Como ejemplos encontramos: respetar a los
rivales y evitar verlos como una amenaza sino como compañeros de la competición;
reconocer los errores propios sin adjudicárselos a personas o causas externas.
Finalmente, me gustaría compartir
un vídeo de la bielorrusa Melitina Staniouta. Tras un trágico comienzo en el
ejercicio de cinta de un campeonato internacional, decide tranquilamente
retirar su cinta del tapiz y esperar otra. La sorpresa viene cuando aparece en
la pista de competición la cinta de una de sus mayores rivales rusas, Daria
Kondakova. Es un gesto muy noble por su parte que demuestra que el compañerismo
va muchos pasos por delante de la competitividad.
3.- ¿Qué finalidad persigue la
creación estética? ¿Hay actividades motrices puramente estéticas? ¿Hay estética en las actividades motrices que no son puramente estéticas?
Lo estético está asociado a la imagen
que crea el/la deportista. Por ello, ha recobrado un importante papel en el
deporte de élite así como amateur. El desarrollo corporal de la Educación
Física necesita el componente estético para establecer una armonía entre los
aspectos que lo definen: lateralidad, coordinación, control postural, ritmo,
etc.
Hay deportes que requieren un
mayor nivel de estética, como es el caso de la gimnasia artística, rítmica,
acrobática… La gimnasia en sí busca la armonía entre los movimientos de forma
que la elegancia prima en los ejercicios.
Al estar 14 años de mi vida
dedicándoselos a la gimnasia rítmica se de lo que hablo. La imagen estética
tanto física como de los elementos ejecutados, es lo que mayor importancia
tiene en este deporte. La puesta en escena junto con la tipología de la
gimnasta y su ejecución es lo que dará la nota clasificadora de cada gimnasta.
Por ello, se considera un deporte muy visual y, en ocasiones, todo un espectáculo.
Por otro lado, existe una disciplina
gimnástica denominada Gimnasia Estética de Grupo. Desafortunadamente es poco
conocida, ya que salió a la luz hace no muchos años y no forma parte del programa olímpico. Esta disciplina no requiere tanta flexibilidad como en la
G. Rítmica, ni tanta fuerza como en la Artística. Consiste en una coreografía
grupal (6-14 componentes) en la que deben desarrollar un ejercicio con dificultades,
elevaciones y colaboraciones con todos los miembros del equipo, así como coordinar
los movimientos al ritmo de la música. Esta modalidad está pensada para
aquellas gimnastas retiradas que quieran permanecer en la competición aunque de
forma menos sacrificada.
Aquí dejo un vídeo de gimnasia estética de grupo en un torneo internacional:
4.- ¿Qué
podemos hacer para conseguir que todo el alumnado aprenda lo que tiene un valor
intrínseco? ¿Cómo hacer para educar en movimiento?
Para crear esa mentalidad y que
los aprendices valoren intrínsecamente todo aquello que hacen y que tienen,
debemos ser nosotros (hablo como posible futura docente) quienes cuenten con
una motivación intrínseca. De esta forma, seremos un buen referente para el
alumnado. Tras esta primicia, debemos recompensar el esfuerzo del individuo sin importar el resultado, que vendrá más tarde y por cuenta propia si los métodos
son correctos; exponer el motivo de la actividad así como la finalidad de la
misma y resaltar los aspectos importantes: compromiso, empatía, etc.; dar paso
a la autorrealización del alumno, dejando espacio y tiempo para que cree sus propias soluciones y aprenda de ellas si es necesario.
A través de la actividad física y
mediante ejercicios o juegos, se puede y se debe educar con valores intrínsecos. Como por ejemplo dejar que sean
los alumnos quienes decidan la actividad a realizar (fútbol), eso despertará
interés en ellos. El profesor, partiendo de la decisión de sus alumnos,
planteará la clase de forma que los valores del deporte cobren todo el
protagonismo: compañerismo, esfuerzo, etc.
Para terminar, comparto este vídeo que, aunque no habla del deporte, habla de la vida en general y creo que es muy interesante:
No hay comentarios:
Publicar un comentario